Rosquillas de nata

Hace bastante que no publico y es lo que tiene el veranico, vacaciones, piscina...

Este año, además de ir a Cubelles, hemos estado unos días en Oropesa. La verdad que me encanta la playa, ¿os cuento un secreto? me colecciono arena de distintas playas, tengo tarritos pequeños con playas de distintos sitios, la mayoría de España, jejeje. Aunque tengo una que me gusta mucho, es de  , es arena negra, con piedritas diminutas, pero lleva un secreto, ahí ponen sus huevos las tortugas bobas, es por eso por lo que más me gusta, jejeje.
Nos ha hecho buen tiempo, así que hemos podido disfrutar de la playica, de paseos nocturnos, vamos un lujo. Menos mal que tengo familia repartida por varios sitios y vamos de "okupas" durante unos días, si no la playa la veríamos de lejos.
Espero que vuestras vacaciones hayan sido buenas.

Bueno, vamos con la recetica, que como no haga la foto ya tendré que hacer otra tanda, ya he tenido que decirle a mi hijo que dejara alguna, jejeje.
Quedan unas rosquillas muy suaves, que no se hacen pesadas.

INGREDIENTES:

- 1 Kg. de harina
-250 g. de nata
-250 g. de azúcar
-3 huevos
-20 g. de levadura en polvo

PREPARACIÓN:

Batir la nata con los huevos y el azúcar hasta que quede cremoso.

Añadir la levadura a la harina e ir incorporándola a la mezcla anterior, amasar bien, hasta que esté totalmente integrada, si se os pega a los dedos, id añadiendo poco a poco más harina hasta que se pueda manejar si que se pegue.

Dejar reposar la masa 30 minutos.

Pasado ese tiempo, id haciendo las rosquillas, yo prefiero coger porciones de masa, formar una bola y luego hacer un agujero en medio con el dedo e ir formando la rosquilla. pero también se puede coger trozos de masa, hacer churros y unirlos bien para formar la rosquilla, eso es a gustos.

Freír en abundante aceite caliente. las rosquillas se hundirán al principio, pero al cabo de los segundos empezarán a flotar, id dándoles la vuelta para que se frían uniformemente.

Sacar y poner sobre papel absorvente.

Para decorarlas, si es con azúcar blanco, la normal, se echa por encima de la rosquilla cuando esta aún está caliente. Si preferís el azúcar glasé, mejor que la rosquilla se haya templado.

Además, quería enseñaros el regalo que me llegó de Duliciosamente , hizo un sorteo y me tocó, además pude conocerla en persona, ya que por motivos familiares tuvieron que desplazarse hasta Zaragoza. Falta en la foto un camino de mesa con cupcake, que aparté un momento para poder colocar las cosicas y luego no me acordé de ponerlo. Todo muy bonito. Que ilusión hace cuando tocan los sorteos. Yo la verdad no me puedo quejar, en un año, tres me han tocado, así que contentísima, jejeje.

Pronto mi blog hará un añico, pero la crisis no me permite hacer un sorteo, bueno, ya lo haré más adelante, cuando pueda.

Un abrazo a tod@s.

Tartas y más tartas

Llevo una temporada sin publicar y es que este año me está minando algo la salud, los cambios de temperatura, que el verano no acabe de llegar, la humedad de este invierno que parecía no terminar...y para colmo, ahora que parece que viene el buen tiempo, al menos por unas semanas, pillo una faringitis, aggg, que ganas tengo de salir de casica.

Durante este tiempo he hecho varias tartas y postres, aunque no hice ninguna entrada. Así que hago esta solo para mostraros alguna de las tartas que he ido haciendo.

Esta tarta la hice para un encuentro familiar, la foto está hecha con el móvil, así salió la pobre, que parece que lleve un velo, jejeje. Con ganache de chocolate con leche y blanco.

La primera tarta del cumpleaños de mi sobrino Victor, 7 años hacía, y esta en concreto era para los papás que estaban en el cumple. Con ganache de dos chocolates y crema de mascarpone de café con un toque de brandy.

Esta era la tarta para los niños, es el coche del transformer amarillo, Bumblebee, se llama, y es que a mi sobrino le encantan los Transformers. Todo relleno de ganache de chocolate.

Y esta es la tercera tarta del cumple de Victor, para celebrar el cumple con la familia al día siguiente, más normalita. Ganache de dos chocolates y crema de mascarpone con baileys.

Esta la hice para el cumple de mi sobrino Hugo. Lleva ganache de dos chocolates y mermelada de cerezas casera.

Y aquí os enseño un trocico de pastel cordobés con un chupito de Pedro Ximenez, mmmm, que bueno. El pastel cordobés está hecho con hojaldre y cabello de ángel, en ocasiones puede estar relleno de cabello de ángel y jamón, esta mezcla aún no la he probado, será cuestión de hacer un Manolete, jejeje, es como llaman al pastel cordobés de ración individual. No soy yo muy de mezclas de sabores dulce salado, pero me encanta el cabello de ángel y también el jamón, así que será cuestión de liarse la mata y hacerlo, jejeje.

Como os habréis dado cuanta me gusta no, me encanta el ganache!!, jejeje. Y he de decir que a todos los que lo prueban, aunque la crema de mascarpone no se queda atrás.

Aún hice unas cuantas más, pero no tengo las fotos.

En fin, tampoco es cuestión de atiborraros a fotos, así que lo dejo por hoy. eso si, antes de despedirme os deseo un feliz verano, a aquellos que os vayáis de vacaciones, disfrutadlas mucho y desconectar, que viene muy bien y los que por una causa u otra no podáis iros de vacaciones, disfrutad de vuestra ciudad, de esos rincones que de normal nos pasan inadvertidos.

Un abrazo para tod@s.

Salmorejo cordobés , berenjenas y viaje a Córdoba

Hace un tiempo que no publico nueva entrada, no porque no esté haciendo cosillas, es que no tengo tiempo de nada. Entre que he estado flojilla de salud, que me fui con la familia a Córdoba unos días, el día a día, vamos, que se me acumulan las tareas.

Pero bueno, hoy vengo a contaros, mi viaje a Córdoba. Tengo que decir que me he enamorado de esa tierra. No se por qué yo me hacía la idea de que todo iba a ser más seco, quizá sea porque en la televisión en verano no hablan más que de sequía en el sur, así que me imaginaba un paisaje parecido a  Los Monegros y nada más lejos de la realidad. He visto verde por todos lados. La de naranjos, olivos y demás he visto. Y el olor, madre mía, como olía a azahar, mmm, inolvidable.
A pesar de que había bastante gente en Córdoba, por que eran las Cruces de Mayo, pudimos disfrutar de un paseo increíble, la judería me encantó y que decir de la Mezquita.

Increíblemente hermoso.
Y que decir de la comida...mmm.
Nunca había comido salmorejo cordobés, la verdad que el tomate y yo no nos llevamos muy bien, me gusta untado en el pan y ponerle jamoncico (vamos, como si fuera tonta, jajaja) y no se porque me lo imaginaba del estilo del gazpacho, que no me gusta. Pero tengo que decir que está delicioso. Y lo sencillico que es de hacer, con productos que tenemos todos en la cocina.

INGREDIENTES:

-3 tomates
-medio ajo
-pan del día anterior
-un chorrito de vinagre
-sal
-aceite de oliva o de girasol
-un poco de jamón y huevo dura (opcional)

PREPARACIÓN:

-Los tomates deben estar bien maduros, cuanto más lo estén, mejor saldrá el salmorejo cordobés. Pelarlos y trocearlos un poco, no hace falta quitarles las pepitas, ya que al pasarlo por la batidora se deshace todo. Ponerlo en el vaso de la batidora.

-Pelar un diente de ajo, partirlo por la motad, quitarle el germen, para que no repita. Yo eché la mitad del diente de ajo, pero esto va en gustos, si te gusta mucho el ajo, échaselo entero.

-Añadirle sal a gusto, un chorrito de vinagre.

-Cortar en trozos el pan, yo compré una hogaza, que tienen bastante miga y fui añadiendo y batiendo, queda como un engrudo. Probarlo, por si falta sal, ajo...

-Y ahora poco a poco ir añadiendo el aceite, sin dejar de batir, vamos, como se hace una mahonesa. Yo lo hice con aceite de girasol, porque me dijeron que el de oliva al tener el sabor más fuerte dominaba demasiado, pero eso es en gustos. El colorcico debe quedar anaranjado y una textura adecuada para untar en el pan, pero que no sea demasiado espeso. Como la textura de una mahonesa, más o menos.

-Por último, se sirve donde vayamos a sacarlo a la mesa y se adorna con trocicos de jamón serrano y trozos de huevo duro. Y a comer con un buen trozo de pan. Mmmm.

Yo como hace tanto tiempo que no escribo, dos recetas en la misma entrada. Está es sencillísima también y me encantó. Son berenjenas con miel de caña. Otro descubrimiento. El contraste de sabores es increíble.

INGREDIENTES:

-Una berenjena
-Harina especial para freír pescado (la compré en Mercadona, tiene unos cuadraditos blancos y azules)
-Leche
-Gaseosa
-Sal
-Miel de caña (en Mercadona hay)

PREPARACIÓN:

-Pelar la berenjena, partirla por la mitad longitudinalmente y cada mitad partirla otra vez longitudinalmente. Y partir en bastoncillos.

-Poner en un recipiente los bastoncillos de berenjenas y cubrir con leche. Añadir sal. Y un buen chorrillo de gaseosa (también se puede sustituir por cerveza). Si flotarán mucho los bastoncillos, poner algo que haga peso, deben estar bien sumergidos. Dejarlos así un mínimo de 4 horas, si son para el día siguiente, mucho mejor, guardar en la nevera.

-Sacar los bastoncillos y dejarlos escurrir.

-Rebozar en la harina.

-Freír en abundante aceite caliente, Se hacen enseguida. Quedan crujientes por fuera y tiernicas por dentro.

-Poner en un plato con papel absorvente para eliminar el exceso de aceite.

-Servir en un plato, coger una cuchara sopera de miel de caña y dejar caer sobre las berenjenas.

-Y comer. A mi marido y a mí nos encantaron, como os digo es un contraste de sabores muy bueno.

Espero que os gusten. Estas dos recetas me las enseñaron mis amigos de Palma del Río (Córdoba), Mariano y Conchi, tienen el restaurante-cafetería Soho, allí en Palma y cocinan de maravilla, no os digo como estaba el rabo de toro o las carrilleras, puff, que ganicas de volver a probarlas, jejeje. 
En la próxima entrada, la receta del pastel cordobés, otra delicia que me encantó. Intentaré no tardar tanto entre entrada y entrada. Aún tengo pendiente una entrada de  los premios que me han otorgado, la tengo en el borrador, pero tengo que buscar los blogs a quien dárselos, que lleva su tiempo.

Os agradezco de corazón que sigáis aquí, una abrazo para cada uno.

Fougasse de sabores

La primera vez que supe de este pan francés, fue en Canal Cocina, estaba viendo a Lorraine Pascale, que me encanta y lo hizo. La verdad tengo que decir, que cuando oí lo que iba a hacer creí que era una forma afrancesada de llamar a la focaccia y bueno, la realidad es que los dos son panes planos a los que se les pueden añadir otros ingredientes.

Me ha entrado la fiebre paneril, así que voy probando recetillas, que eso de hacer de cocinillas me encanta, jejeje. Hace poco hice unos panecillos que estaban deliciosos, pero quedaron algo raros de forma, así que no les hice foto, pero seguiré perfeccionando, jejeje.

Esta receta, como os digo, la vi hacer a Lorraine Pascal,incluso me copié la receta. Pero estas fougasse no las he hecho con esa receta, si no con la que encontré en  Tú te lo guisas, la receta la habían sacado del libro de Xabier Barriga, en cuanto pueda, me lo compro.

Las fotos, como veréis no son muy buenas, pero es que era la hora de cenar, cuando las saqué del horno y mi marido y mi hijo casi me hacen un montín, jejeje, no paraban de decir:"queremos comer, comer, comer..." a la par que daban con los cubiertos en la mesa. Así que no me quedó más remedio que ir deprisa, si no, me dejan con la cámara de fotos sin poder fotografiar nada. Nos las comimos, y estaban, mmm. Después de probarlas, mi marido me dijo:"oye y esto con huevos fritos como estará"...puuff, para que dijo nada. ya os podéis imaginar lo que cenamos. Además tenía huevos de las gallinicas de mi madre, que tienen un montón de espacio para ellas, los huevos son con yema naranja intenso y el sabor, ni os cuento. Bueno, no me enrollo más que si no, no paro.

INGREDIENTES:

-500 gr. de harina de fuerza.
-300 gr. de agua.
-50 ml. de aceite de oliva.
-12,5 g. de levadura fresca (o 4 g. de levadura seca de panadero)
-10 gr. de sal.
-relleno al gusto (yo puse jamón serrano, queso, pimiento)

PREPARACIÓN:

Poner los ingredientes en el bol de la amasadora, si no tienes, pues a mano. Amasar bien hasta que se integren todos los ingredientes y la masa de despegue de los lados. Es una masa viscosa, se os pegaran los dedos si o si, porque la masa lleva bastante líquido, así que paciencia.

Una vez amasado todo, hacemos una bola, si es necesario, para manejarla untaros las manos en un poco de aceite de oliva, eso evitará que se os pegue la masa y podréis manejarla mejor.

Dejar levar hasta que doble el volumen, cubierto con papel film untado en aceite de oliva y tapado con paños.

Sacar la masa ya levada a la encimera previamente aceitada, amasar ligeramente y partir la masa en cuatro partes. Colocar el relleno que hayamos elegido en cada parte y cerrar y amasar para que quede bien repartido. Como os digo, admite muchos rellenos, cebolla, ajo, hierbas, pimiento, jamón...la imaginación al poder. las masamos bien y hacemos forma de bola.

Ponemos sobre la placa del horno con papel de hornear y ponemos dos de las bolas. Las achatamos  para formar tortas, bien con las manos, bien con un rodillo previamente untado con aceite. Dejamos levar un rato hasta que doble el volumen.

Cuando ya estén, haremos unos agujeros ayudándonos de algún objeto plano, como las rasquetas de cocina o espátulas. Le haremos la forma característica de estos panes, parece hojas de Costilla de Adán, no se si las conocéis, pero se dan un aire.

Precalentar el horno a 250º.

Meter en el horno durante unos 25 minutos. Este pan necesita humedad en el horno, así que o bien ponéis una olla que se pueda meter al horno, con algo de agua y trapos de cocina dentro, para que vaya soltando vapor o podéis hacer como vi que hacía Lorraine Pascal, en otra bandeja de horno, puso cúbitos de hielo, que soltaban el vapor. Yo lo hice con la olla, que no tenía cúbitos de hielo.

Una vez pasado el tiempo, sacar y dejar enfriar en una rejilla o como hacen los franceses, usan palos o alguna herramienta de cocina, la introducen por los agujeros de la fougasse y dejan que se enfríen al aire, sujetos los palos a algún sitio. Yo usé una rejilla.

Untar los panes con aceite de oliva con ayuda de un pincel de silicona.

Y a zampar.

Que aproveche.

Un abrazo a tod@s.

Leche frita

Esta Semana Santa, como las últimas, está siendo muy lluviosa y eso desluce mucho, los que más  lo siente  son los cofrades, que están en algunos casos durante un año preparándose y al final, por el tema de la lluvia no pueden salir. Por supuesto que la  que vamos a ver las procesiones también lo sentimos.

La cosa es que en muchos casos, los que no nos hemos ido de nuestra ciudad, aprovechando los días de fiesta, nos quedamos en casita, calénticos. Eso hace que en muchas casas estos días se hagan comidas y postres típicos de estas fechas.

En mi caso, he hecho leche frita y torrijas (unas con azúcar y canela y otras bañadas en almíbar de miel).

Tengo que decir, que cuando era pequeña, no recuerdo haber comido postres típicos de las fechas, si acaso algún buñuelo en alguna churrería, pero en casa no recuerdo que se hicieran, mi madre estaba siempre liada cosiendo a máquina. No fue hasta más mayor que empecé a probarlos y a querer hacerlos.

En internet hay multitud de recetas estos días, por todos lados aparecen torrijas, buñuelos, leche frita, monas, estas últimas no es que sean típicas de aquí, en los pueblos si las hacían, ahora si que hay pastelerías que también las hacen , pero en Zaragoza, no eran típicas. Lo único que veías en las pastelerías era alguna figura de chocolate, pero para nada como las hacen en otras provincias, que hasta concursos tienen. Pero todo cambia y no es raro ver en alguna pastelería postres típicos de otras provincias.

Bueno, no me lío más, voy con la receta de la leche frita.

INGREDIENTES:

-1 l. de leche

-8 cucharadas de azúcar ( yo puse 6 cucharadas de azúcar normal y dos de azúcar vainillado)

-8 cucharadas de maizena.

-una rama de canela.

-Corteza de limón.

-3 yemas de huevo.

-huevo para rebozar.

-harina y pan rayado.

-azúcar y canela.

PREPARACIÓN:

Poner en un cazo la leche, menos un vaso que reservaremos, con la rama de canela, la corteza de limón y el azúcar, dejar que se vaya haciendo, cuando de su primer hervor, retirarlo un poco del fuego y tapar con un plato, para que infusione.

A parte, cogemos el vaso de leche que habíamos reservado y vamos añadiéndole las cucharadas de maizena y removemos hasta que se haya disuelto del todo. 

Volver a poner el cazo en el fuego, habiendo retirado la canela y la corteza de limón. Cuando esté caliente otra vez, si es que ha bajado mucho la temperatura, ir añadiendo la leche con la maizena sin parar de remover.  Añadir las 3 yemas batidas un poco. Seguir removiendo, hasta que tome consistencia de bechamel densa.

Poner sobre una fuente, tapar con film transparente y dejar enfriar, al menos 2 horas, hasta que coja consistencia y se pueda manejar.

Coger un cuchillo afilado y mojarlo en agua e ir cortando a cuadrados. 

pasar por harina, huevo y pan rallado y freír en abundante aceite, debe estar caliente. Cuando se haya dorado por las dos partes, sacarlo y ponerlo sobre una fuente o plato con papel absorvente para eliminar el exceso de aceite. 

Mezclar azúcar y canela en polvo en un plato e ir pasando la leche frita por ellos. 

Otera opción es sustituir el pan rayado por galletas machacadas. Se reducen a polvo con un robot o metiéndolas en una bolsa de congelación, por ejemplo y machacarlas con el rodillo, para que queden más rudimentarioas, no reducirlas a polvo del todo. El sabor cambia totalmente.

Estas están rebozadas con galletas.

Ya de paso, os enseño las torrijas que hice, 

Estas son las tradicionales, bañadas en leche y pasadas por azúcar y canela. Están tan amarillas, porque los huevos que usé para rebozar eran de las gallinas de mi madre, que viven sueltas y tienen mejor alimentación, y en el huevo eso se nota un montón, por que tienen un sabor increíble,  pero sobre todo  se nota la diferencia a primera vista en el color de la yema, que tira a anaranjada, no tan amarillenta pálida como las de los huevo comerciales.

A estas les cambié solo la parte final, en vez de estar con azúcar y canela, hice un almíbar de miel y las bañé con él. Ríquísimas.

Espero que hayáis disfrutado de estas fechas, apesar de la lluvia.

Quiero agradeceros a tod@s el que me acompañéis en este blog y en mi página de face. Muchas gracias.
Un abrazo.

Tarta de queso

Antes de meterme de lleno con la recetica, quería deciros que  esta semana he tenido noticias buenas y malas...

La mala, mi ordenador se murió, bueno, el ventilador de mi ordenador, con lo que no lo podía encender a riesgo de que se quemara del todo, la mala suerte del todo fue no poder sacar nada de información, nada..puuff, la de tutoriales que tenía guardados, la de páginas en marcadores, la de imágenes...que disgusto me llevé. Así que me fui a comprar uno, a plazos, a ver si me dura muchooo.

La buena, buenísima noticia es que en mi página de face del blog Aquí  ya somos 100, bueno, concretamente en estos momentos 104, que alegría. Si a eso le unimos la 3696 visitas a este blog y los 76 seguidores, es para saltar de alegría. Muchísimas gracias a tod@s. Y muchísimas gracias a  estas páginas de face, sin cuyas iniciativas para tener "me gusta" no habría conseguido tener 100 "me gusta" en mi página: Repostería Milemo , Motivada con la Cocina y ChabellArt Bisutería Artesanal .

Y ahora si, la receta de la tarta de queso, tengo que decir que me encantan este tipo de tartas, versiones hay miles. hace muchos años, en un sitio de aquí de Zaragoza, daban una tarta de queso deliciosa, por aquel entonces, aunque me gustaba muchos hacer postres, no me dió por preguntar por la receta, así que yo busco recetas de tarta de queso que sean como aquella, por su textura, su sabor, de momento no he dado con ella, pero seguiré probando, jejeje. Lo bueno de esto, encontrar tartas de queso buenísimas, como esta que os traigo. En casa ha gustado mucho. Esta receta la encontré en
Cuchillito y Tenedor ,aquí le dan un toque de galleta y caramelo por encima. Yo he cambiado alguna cosilla, como el queso, que puse Mascarpone. Bueno, no me enrollo más.

INGREDIENTES:

-500 g de Marcarpone (en la de Cuchillito y Tenedor le pone 400 g de queso crema)
-5 huevos
-4 cucharadas de maicena
-4 yogures naturales
-6 cucharadas de azúcar
-ralladura de limón

PREPARACIÓN:

Precalentamos el horno a 200º.

Batimos los huevos con el azúcar, los yogures y el mascarpone.

Una vez mezclado bien, añadiremos las cucharadas de maicena, seguimos batiendo. 

Mientras forrar el molde en el que lo vayamos a hacer con papel de horno, es importante que el molde sea alto, porque sube mucho, aunque luego se baja al enfriar, si no se estuviera seguro de si se puede salir, lo mejor es hacerle una pared más alta con el papel de horno, así seguro que no se sale.

Verter la mezcla en el molde e introducir en el horno, bajar entonces la temperatura a 180º.

Hornearemos unos 45 minutos, no obstante, la mejor manera de saber que está hecha, es pincharlo con un palillo, si este sale limpio, ya está hecha la tarta, si sale húmedo, dejarla un poco más. Si vierais que se tuesta mucho la parte de arriba y que no está hecha del todo, hay cubrirla con papel de plata, para que siga haciendose sin peligro de que se nos queme.

Apagaremos en horno y dejaremos templar dentro la tarta con la puerta del horno entreabierta. después sacaremos y dejaremos enfriar a temperatura ambiente.

Desmoldar.

Este tipo de tarta admiten un montón de acompañamientos, como mermeladas, o caramelo, siropes, fruta...Como siempre la imaginación es nuestra mejor aliada.

Yo le puse mermelada de fresa casera, ahora que las fresas están tan ricas, una no puede resistirse a hacer mermelada, jejeje.

La foto de la tarta entera no os la puedo enseñar, fue enfriarse y darme la vuelta y mi hijo y mi marido se tiraron de cabeza a comerse un trozo, casi me los como yo, aggg, que rabia, pero bueno, seguro que os hacéis una idea.

Espero que os guste, a mi me ha encantado, no obstante seguiré probando con otras tartas de queso.

Un fuerte abrazo para tod@s.

 

Pan de leche

 

Hace un tiempo, vi en televisión unas mojas que hacían estos panes, me copié la receta y ahí quedó guardada, al final, el otro día decidí hacerlos, a ver que tal salían y tengo que decir que están deliciosos, muchos mejores que los que venden. Y lo mejor, son fáciles de hacer. Eso si, como todo este tipo de bollería, está mejor recién hecho que al día siguiente, aunque para untar en la leche siguen estando deliciosos, así que os recomiendo que no hagáis muchos de vez a no ser que sepáis seguro que os los vais a comer.

Vamos con la recetica, ya veréis que sencilla.

INGREDIENTES: (para unos 15 panecillos)

-500 g. de harina.
-50 g. de mantequilla en pomada.
-250 ml. de leche.
-50 g. de azúcar.
-40 g. de levadura fresca.
-huevo o leche (opcional)

PREPARACIÓN:

Calentar en un cazo la leche hasta que esté tibia, cuando lo esté, deshacer la levadura en ella. Reservar.
Aparte, en un cuenco, echar la harina, la mantquilla en pomada, el azúcar (no salen muy dulces con esta cantidad, si los quieres más dulces, añade un poco más de azúcar) y amasar bien.

Ir añadiendo la leche poco a poco e ir mezclando bien.

No se tiene que quedar pegada a los dedos, así que si se os queda, añadirle poco a poco algo más de harina.

Hacer un churro con la masa e ir haciendo trozos de más o menos el mismo tamaño, unos 35/40 gr. cada uno, por ejemplo. hacer bolas con cada trozo y achatarlas un poco. Ir poniéndolos en la placa del horno con un papel de horno previamente.

Barnizar cada pan con huevo o con leche, como se prefiera, con los dos queda bien. Si habéis hecho pocos panecillos, pues hacerlo con leche para no malgastar el huevo, pero como os digo, con los dos queda bien.
Con un cuchillo hacer 3 marcas diagonales, en el pan. pero no cortar la masa mucho, si no se abrirá demasiado.

Dejar fermentar en un sitio cálido, durante 2 horas, tapado con un trapo o con papel film.

Unos 20 min. antes de que se acaben las 2 horas de fermentado, precalentar el horno a 200º.

Meter los panes al horno durante 15 minutos, como cada horno es un mundo, cuando hayan pasado 12 minutos, ir vigilándolos, para que no se doren demasiado.

Sacarlos y dejarlos enfriar sobre una rejilla, aunque un poco calientes están de muerte.

* A algunos panes se les puede añadir antes de hace la bola, lágrimas de chocolate, naranja confitada, lo que se so ocurra que pueda quedar bien. Yo hice dos con lágrimas de chocolate y dos con naranja confitadas (el resto eran sin nada dentro, jejeje) y quedaron fantásticos.

Lo bueno de estos panes es que se pueden comer con dulce, como mermelada, por ejemplo o con salado, si os gusta el contraste, como por ejemplo, relleno de queso y jamón york.

Espero que os haya gustado.

Quería daros las gracias a tod@s, por seguirme, por visitar mi blog, muchísimas gracias, de corazón.
Un abrazo.

Galletas de mandarina y limón

Hoy hace un frío que pela y apetece encender el horno, así que me he decidido por unas galleticas, que hacía días que no había hecho.
Antes de mostraros las galletas, os quiero enseñar algunas fotos, este fin de semana, se celebraba el segundo centenario de la salida de las tropas francesas de Zaragoza, ya que estuvieron en la ciudad de 1808 a 1813. Se quería homenajear a los más de 10.000 fallecidos que enterraron en una fosa común en la Arboleda de Macanaz. 35 grupos venidos de distintos lugares de España  (Bailen, Mallorca, Madrid, Valencia...y por supuesto, las tropas aragonesas) y de Europa (de Polonia, Inglaterra, Rusia, Francia) recrearon los más fiel posible lo que aconteció para que al final, las tropas francesas se rindieran y abandonaran la ciudad. El sábado además de un desfile, un homenaje a los caídos y una arenga del General Palafox, hubo una recreación de la batalla por algunas de las calles de Zaragoza en las que se luchó realmente bajo el mando del General Palafox y de Espoz y Mina. Era impresionante, la verdad, oír los cañonazos, los mosquetones, los gritos de las tropas. Solo pensar lo que realmente pasó, se me ponen los pelos de punta. El domingo en el Palacio de la Aljafería, fue la batalla final, bajo el mando de Espoz y Mina, las tropas españolas lograron reducir al ejercito francés y este se rindió. Como digo, impresionante, ya que todos estos voluntarios, lo viven y recrean como digo, lo más fiel posible, con heridos, muertos...

Y ahora si, vamos con las galleticas.

INGREDIENTES:

-125 gr. de azúcar.
-125 gr. de mantequilla sin sal en pomada.
-1 huevo.
-250 gr. de harina.
-una cucharadita de levadura tipo Royal.
-Una pizca de sal.
-Ralladura de limón.
-Ralladura de mandarina.


PREPARACIÓN:

Precalentamos el horno a 180º.
Mientras batimos la mantequilla en pomada con el azúcar hasta que blanquee. Luego agregamos el huevo y mezclamos bien.
En un cuenco aparte, mezclamos la levadura, la harina y la sal y tamizamos encima de la mezcla de mantequilla. Vamos amasando.
 Limpiamos bien el limón y la mandarina y los rallamos, teniendo cuidado de no rayar la parte blanca e incorporamos a la masa de galletas. Seguimos amasando. No se nos tiene que quedar pegada la masa a los dedos, si esto pasará, añadir poco a poco algo más de harina.
Hacer bolitas de entre 12 g. a 15g. para que más o menos queden todas las galletas iguales. Poner en la bandeja de horno una hoja de papel de hornear. Ir poniendo las bolitas un poco separadas unas de otras y achatarlas un poco con los dedos.
Dejar hornear entre 10/12 min.
Sacar y dejar enfriar sobre una rejilla.
Una vez frías, se puede espolvorear azúcar glas sobre ellas. O mermelada de naranja una poco reducida con licor o con agua si es para que las coman niños.
Yo a algunas les he puesto un poco de mermelada de naranja (para hacerla más manejable, se puede añadir a la mermelada un poco de zumo de naranja o licor si es para adultos) y naranja confitada encima, el resto las espolvoree con azúcar glas. Podéis adornarlas como queráis, incluso poner gajos de mandarina, por ejemplo.

Espero que os gusten.